martes, 30 de diciembre de 2008

manifiesto cubista sobre la paella























El arte de comer paella es ahora, un arte gastronómico total, en el que se concilia en un sólo acto, el presente, el pasado y el porvenir.
He aquí cómo cocer, comer y sobremesar adecuada y correctamente una paella:
1. Un número equitativo de hombres y mujeres, sentados en una mesa casi rectangular; unos vestidos de blanco nuclear, otras de negro riguroso, creando así contrastes estéticamente adecuados para el buen engullidor de paella.
2. El paellero clásico de 2 asas, ha dado paso a uno, con tantas asas como comensales, dispuestas éstas en lugares insospechados, dependiendo de la mirada de cada uno.
3. Los ingredientes, aportados democráticamente, dependerán de la voluntad de cada uno; de manera que cada paella será única e irrepetible, pudiendo ser sosa o salada, también a voluntad.
4. El cromatismo de dichos ingredientes se limitará al verde, ocre, gris y negro. Eventualmente se utilizará el rojo.
5. Los alimentos serán introducidos en el paellero, por orden de aparición de los comensales a la mesa, y en el lugar que cada uno prefiera, pudiendo ocurrir que haya partes saturadas y algunas otras, escasas.
6. Todos los ingredientes serán cortados y rebanados, según figuras geométricas perfectas, a excepción del arroz.
7. El fuego, situado sólo en la mitad exacta del diámetro de la base del paellero, lo rebasará para que algunos alimentos adquieran tiznes negruzcos que aporten volumen y contorno. Los comensales, abrirán/cerrarán alternativamente la entrada de aire para que el fuego actúe arbitrariamente y no siempre sobre los mismos alimentos.
8. Para evitar quemaduras por la dispar distribución de las asas del paellero, se utilizará papel de periódico (preferiblemente las portadas del France Soir) a modo de protector.
9. Cuando el buen olor informe del final de la cocción de la paella, ésta se colocará ora en un extremo, ora en el centro, ora en el otro extremo de la mesa.
10. Primero comerán la mitad de los que visten de blanco, luego la mitad de los de negro y finalmente las otras dos mitades de blanco y negro, conjuntamente.
11. Al finalizar la comilona se distribuirán frutas, copas, botellas de Anís El Mono y cajetillas de tabaco entre los comensales.
12. Por último, los restos de la paella serán adheridos a un lienzo, formando una figura de geometría gastronómica perfecta, a la que se unirán los restos de los periódicos usados como protectores en las asas (ya tiznados), arena utilizada para apagar el fuego y el papel de la pared adyacente al lienzo.
El resultado: un todo cubista puro gastronómico táctil.

2 comentarios: